Casitas de madera para niños – qué casita elegir para el jardín, dónde poner la casita en el jardín

Casitas para niños en el jardín
Las casas infantiles de madera hacen realidad los sueños de muchos niños. Las casitas de madera de jardín tienen un aspecto encantador y proporcionan a los niños una diversión especial. Aconsejamos qué casa infantil elegir para el jardín y dónde colocarla.
Una casa de jardín es el sueño de todo niño. Los niños pueden jugar en ella, relajarse y tener invitados y, si es necesario, esconderse del mundo. Así que si tenemos espacio en la parcela, hagamos felices a nuestros hijos y preparemos una casa de jardín para ellos.
Por supuesto, no hace falta que la construyamos nosotros mismos, porque hay muchas casitas infantiles de madera prefabricadas en el mercado. Sin embargo, antes de decidirnos por alguno de ellos, debemos saber qué debemos tener en cuenta a la hora de elegir y en qué debemos fijarnos.
Casas de madera prefabricadas para niños – cómo comprar
Normalmente, el primer criterio que tenemos en cuenta a la hora de comprar una casa para niños es su precio. Aunque en realidad es uno de los elementos clave de la compra, no nos obsesionemos únicamente con el coste. Establezcamos un límite de precio que no podamos sobrepasar, y en esta zona, veamos unas cuantas viviendas que podamos comparar entre sí. Un aspecto importante a tener en cuenta es el material del que está hecha la casa. Las casas de plástico son las más baratas, pero no son muy duraderas. Aunque nos tientan con sus fabulosos colores y su precio razonable, se deterioran rápidamente y se decoloran con facilidad bajo el sol, y su interior se calienta mucho cuando hace calor. Su escaso peso también puede hacer que la casa se vuelque con fuertes vientos, por lo que una mejor solución serían las casitas infantiles de madera (normalmente de pino o abeto), más resistentes, duraderas y ecológicas.
No te pierdas: Diseño de castillos con palets para niños
¿Cómo debe ser una casa de madera para un niño?
El interior de una casa de madera no se sobrecalienta demasiado cuando hace calor y se mantiene agradablemente caliente cuando hace buen tiempo. Este tipo de casa también puede ampliarse y modificarse fácilmente para adaptarse a las necesidades de un niño en crecimiento. Sin embargo, a la hora de elegir una casa, también hay que prestar atención a su diseño, que debe ser estable y cuidadosamente considerado. La madera utilizada para la construcción debe estar cuidadosamente alineada y libre de agujeros, astillas, daños o nudos, así como de clavos, tornillos o elementos punzantes que puedan poner en peligro la seguridad de nuestro hijo (la casa también debe tener certificados de seguridad) de las paredes y el suelo.
Si la casa de los niños tiene una ventana, debe haber un plexiglás de seguridad en lugar de un vidrio fácil de romper. También es una buena idea que la casa sea de madera no tratada y destinada a ser pintada por nosotros mismos, lo que no sólo nos permite elegir libremente los colores, sino que nos da un control total sobre el tipo de pintura o impregnación utilizada (se deben elegir pinturas ecológicas y seguras para el niño).
Lo siguiente es el tamaño de la casa. Un espacio pequeño es suficiente para un niño pequeño (ya unos 120-150 x 120-150 cm), pero los niños más grandes o los hermanos necesitan una habitación más grande. Por lo tanto, debes elegir el tamaño de la casa para que puedan caber libremente en ella.
Dónde colocar la casita de madera para los niños en el jardín
Una vez que hayamos elegido la casa adecuada para nuestro hijo, debemos colocarla en un lugar que sea seguro y claramente visible para los cuidadores desde cualquier lugar del jardín y desde la ventana de la casa. La casa no debe colocarse junto a un depósito de agua, junto a plantas peligrosas (por ejemplo, plantas espinosas, urticantes o venenosas), junto a pozos, instalaciones de tierra o eléctricas o bajo árboles altos, ya que son lugares potencialmente peligrosos que suponen una amenaza para el juego de los niños.
Una casa no debe estar en una zona completamente sombreada porque no sólo sería oscura y sombría, sino que además no tendría forma de calentarse con el sol y mantenerse fresca. La madera que sigue a la sombra también será más susceptible a la humedad que la madera expuesta al sol.
Si la casa está destinada a un niño pequeño, también debe ser lo más sencilla posible y estar situada a ras de suelo, mientras que para los niños mayores puede colocarse sobre una estructura de madera y equiparse con escaleras, toboganes, balcones, escaleras, jardineras e incluso muros para trepar. A la hora de elegir una casa de madera, hay que tener en cuenta que, además de una serie de ventajas, también tiene desventajas. En primer lugar, suele ser más caro que las casas de plástico y requiere un mantenimiento sistemático. Tampoco se puede trasladar a una nueva ubicación con tanta facilidad.

 

¿Te gusta este artículo?

Share on facebook
Compartir en Facebook
Share on twitter
Compartir en Twitter
Share on linkedin
Compartir en Linkdin
Share on pinterest
Compartir en Pinterest

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *